Siguiendo con los ciclos de la vida, hoy nos toca hablar sobre el maravilloso y tumultuoso tiempo adolescente.
Todos esbozamos una sonrisa cuando vienen esos recuerdos plagados de amistad, experiencias nuevas, tiempos libres llenos de proyectos. Y es genial que así sea, el problema se instala cuando un adulto desea no haber salido nunca de allí y hace todo lo posible por volver a cualquier costo. Eso sucede cuando considera esos momentos como los mejores de su vida, atesorando cada situación vivida y cada fantasía como la única experiencia de felicidad de la que tiene memoria. Sigue leyendo