En estas Pascuas el Papa Francisco hizo un llamado a la paz del mundo. En tiempos tan convulsionados sus palabras han sido un faro de Luz para quienes elegimos oírlo.
Pidió por Venezuela: «para que los ánimos se encaminen hacia la reconciliación y la concordia».
Por Siria: «que cuantos sufren las consecuencias del conflicto puedan recibir la ayuda humanitaria necesaria; que las partes en causa dejen de usar la fuerza para sembrar muerte, sobre todo entre la población inerme, y tengan la audacia de negociar la paz, tan anhelada desde hace tanto tiempo. Te rogamos que consueles a las víctimas de la violencia fratricida en Irak y sostengas las esperanzas que suscitan la reanudación de las negociaciones entre israelíes y palestinos» Sigue leyendo