Sembrad en los niños…

Maria Montessori fue una mujer que dedicó su vida a los niños pero lo hizo de una manera diferente dejando en su legado una enseñanza trascendente. Ella comprendió y transmitió que hay que dejarlos Ser, hay que educarlos respetando sus naturalezas y no ignorando que poseen un mundo puro, pleno de virtudes y sabiduría que no debemos ensuciar ni torcer con nuestros esquemas rígidos de enseñanza.

El maravilloso mundo de los libros

Recién llegada de visitar a mis ahijados en Chaco quería compartir con ustedes una de las tantas vivencias que tuve la dicha de tener con ellos.

Se realizo el Encuentro de «Lectura y cuidado, leer para/con el otro» y Gloria (la directora de las dos escuelas) leyó un cuento que me emocionó hasta las lágrimas, se titula Virtudes Choiqué (clickea acá para leerlo)

Lo que la maestra del cuento enseña es muy cierto, creo firmemente en ello y por eso no me canso de escribirlo: cada niño posee una virtud que nosotros los adultos tenemos la obligación de encontrar y potencializar porque si no lo hacemos los dejamos perdidos en un mundo competitivo y despiadado.

Todo ser tiene algo que lo caracteriza como único, especial, cuando no lo vemos no es porque carezca de ello sino porque nosotros estamos incapacitados de hallarlo.